Mejores ideas para guardar la tabla de planchar
Como alguien que ha vivido la odisea de intentar organizar un hogar pequeño, sé de primera mano lo desafiante que puede ser encontrar el lugar perfecto para cada objeto, especialmente para aquellos tan indispensables pero engorrosos como la tabla de planchar.
Siempre parece estar en medio, demasiado grande para cualquier rincón o simplemente estorbando. ¿Te suena familiar? Pues bien, hoy estoy aquí para compartirte las mejores ideas que he descubierto para guardar la tabla de planchar. Consejos prácticos que no solo te ahorrarán espacio, sino que también te permitirán acceder a ella fácilmente cuando la necesites.
Tabla de contenidos
- 1. Colgarla en la pared
- 2. Colgarla en una puerta
- 3. Tabla de planchar plegable y oculta en un cajón
- 4. Mueble de planchado con tabla escondida
- 5. Tabla de planchar plegable de pared
- 6. Instalar la tabla en un armario
- 7. Instalar la tabla en un cajón vertical
- 8. En un compartimiento estrecho de tu armario
- 9. Detrás del espejo
- 10. Mueble con cestas y tabla de planchar
- 11. Tabla de planchar plegable y portátil
1. Colgarla en la pared
Una de las formas más prácticas de guardar la tabla de planchar es simplemente colgándola de la pared. Esta idea es que no solo te ahorra un espacio valioso, sino que también mantiene todo bien organizado y a mano. Solo necesitas un par de ganchos, pero venden soportes específicos para eso que muy económicos. Si no quieres que se vea la tabla, puedes colgarla detrás de la puerta o incluso dentro de un armario.
2. Colgarla en una puerta
Si no quieres hacer agujeros en la pared, también tienes la posibilidad de colgarla de una puerta. Venden unos ganchos para ese propósito, que vienen con protección para asegurarse de que no se muevan ni dejen marcas en la puerta.
3. Tabla de planchar plegable y oculta en un cajón
Para quienes buscan una solución aún más integrada y discreta, existe la increíble opción de las tablas de planchar plegables que se instalan dentro de un cajón. Lo mejor de esta idea es que estas tablas se pueden adaptar a casi cualquier cajón, siempre y cuando este cumpla con unas medidas mínimas de anchura, longitud y profundidad.
Imagina lo práctico que sería tener tu tabla de planchar escondida en un cajón del lavadero o en el armario de la ropa. Simplemente abres el cajón, despliegas la tabla, planchas lo necesario y la vuelves a guardar sin que nadie se dé cuenta.
4. Mueble de planchado con tabla escondida
Hay otra alternativa que, aunque no es de mis favoritas, podría interesar a algunos. Se trata de un mueble de planchado especialmente diseñado para quienes buscan funcionalidad sin renunciar al estilo. Este mueble incluye una tabla de planchar que se pliega en su parte trasera cuando no se utiliza.
La única pega es que, para que no se vea la tabla plegada por detrás, necesitaras poner el mueble contra la pared cuando no planches. Eso sí, como punto a favor, el mueble está equipado con ruedas, lo que facilita moverlo por casa según te convenga.
Además, este ingenioso mueble te ofrece espacio suficiente para guardar tanto la plancha como cualquier cosa que necesites tener a mano para tu sesión de planchado.
5. Tabla de planchar plegable de pared
Otra opción que vale la pena considerar son las tablas de planchar plegables que vienen listas para atornillar directamente a la pared. Lo bueno es que, cuando no las necesitas, simplemente las pliegas hacia la pared y ya está.
Quedan muy discretas y apenas ocupan espacio, lo cual es ideal si buscas mantener tu casa despejada y no comprometer demasiado la estética. Hay varios modelos disponibles, así que seguro encuentras uno que se ajuste a lo que necesitas. En el enlace de abajo puedes ver distintos tipos de tablas de planchar plegables de pared.
6. Instalar la tabla en un armario
Si eres un poco manitas, te va a gustar esta idea: crear tu propio armario de planchado. Este no es solo un sitio para guardar la tabla de planchar, sino que también te brinda espacio para la plancha y todos esos accesorios de planchado que nunca sabes dónde guardar.
He echado un vistazo a algunos modelos ya hechos que puedes comprar, pero sinceramente, la calidad dejaba bastante que desear, así que he preferido no recomendar ninguno en concreto. Además, personalmente pienso que adaptar una tabla de planchar a un mueble específico no es tan complicado como podría parecer, y el resultado final bien vale la pena el esfuerzo. También se podría hacer con las tablas plegables que expliqué anteriormente.
7. Instalar la tabla en un cajón vertical
Y aquí va otra idea que me parece muy ingeniosa es instalar la tabla de planchar en un cajón vertical. A diferencia del cajón horizontal del que hablamos antes, el vertical es incluso mejor, porque su mayor espacio te permite poner una tabla más grande y guardar también la plancha dentro.
Es cierto que no todos tenemos este tipo de cajones en casa, pero puedes mandarlo a hacer a medida. Así, tendrás una solución superpráctica que mantiene todo lo relacionado con el planchado perfectamente organizado y oculto.
8. En un compartimiento estrecho de tu armario
Otra idea sencilla y que a menudo se pasa por alto es aprovechar esos compartimentos estrechos del armario donde normalmente no sabes muy bien qué guardar. Ahí es donde tu tabla de planchar puede encajar perfectamente. Es una forma genial de tenerla a mano, pero sin que esté a la vista o estorbe en otras áreas de tu casa.
9. Detrás del espejo
Una idea brillante para quienes buscan optimizar el espacio sin sacrificar el estilo de su habitación es instalar la tabla de planchar detrás de un espejo.
Este espejo se desliza hacia un lado para revelar la tabla escondida tras él. Es una maravilla porque combina funcionalidad y discreción; la tabla queda totalmente oculta después de su uso y el espejo añade un toque de elegancia al ambiente.
Puedes encargar hacer un mueble de este tipo, aunque también lo venden ya hecho. Definitivamente, es una solución práctica y con mucho estilo.
10. Mueble con cestas y tabla de planchar
Este tipo de mueble de planchado con ruedas incluye una tabla montada encima de unas cestas de almacenamiento. Los laterales son abatibles, reduciendo así su tamaño cuando no estás planchando.
No solo resulta ser un bonito mueble que se integra bien en cualquier rincón de tu hogar, sino que las cestas de debajo se convierten en el lugar ideal para guardar la ropa pendiente de planchar, así como la plancha misma. Es la combinación perfecta de utilidad y diseño para mantener todo organizado y a mano.
11. Tabla de planchar plegable y portátil
También existe la opción de optar por una tabla de planchar plegable y portátil. Estas suelen ser más compactas que las tablas estándar, pero la ventaja es que, una vez plegadas, caben casi en cualquier armario, optimizando al máximo el espacio.
Además, hay modelos en el mercado que llevan la funcionalidad un paso más allá: no solo se pueden colgar de un gancho para no ocupar espacio en el suelo, sino que también incluyen un espacio dedicado para guardar la plancha en la misma tabla.
Y así hemos llegado al final de este recorrido por distintas formas de guardar la tabla de planchar de manera práctica y creativa. Me encantaría saber qué os han parecido estas opciones y, por supuesto, si tenéis algún truco propio o alguna solución ingeniosa que no haya mencionado, no dudéis en compartirla en los comentarios.